Breathe

Breathe
Nunca ha habido nada, pero todo lo que hay es mío.

6.27.2007

Belleza escoltada por el deseo negado.

Tu carita de ángel leso era la vulnerabilidad masificada por toda mi piel.

Si sabrías, si tan solo sabrías que decirme no es lo que seduce a mi perra en celo. Tus manos bajando despacio, te acercás y yo entrabro la boca e inhalo fuera y de repente te vas. ¿Lo qué? sí, corrés la mano, estás deprimida, lo sé y me encanta. No porque me guste verte sufrir o quizás sí, pero lo que me atráe es que estés tan ajena, que tu cuerpo exhalte a mi cuerpo y lo deje allí, en coma de espera de tus manos sobre mi inhalar, sobre la lujuria que esperaba y no estás, porque no, estás desconcentrada. Carajo y gracias.

Carajo porque ahora me dejás con las ganas, porque ahora te hacés ajena, difícil, dale nena, difícil, sí, dale que me encanta. Ajena y esquiva, perteneciente a tu dolorcito depresivo y te acaricio, caricias en sobredosis por todo el cuerpo y te acercás de nuevo pero te vas.

Carajo.

Y dale, gracias, andate. Porque me encanta carajear tanto que me dejes con la sangre irrigada y mi boca palpando tu boca y tu boca rehuyendo, tus párpados bajos, semi dormida, apretándo fuerte mi cintura, pasando tus manos por mis senos rebosantes y yo te veo, dormida y congelada, ajena y triste...

Y corten esa imágen.

Tu mirada perdida, escoltada por lágrimas que no largás, tus palabras mudas, tus abrazos indecibles y mi cuerpo casi roto, esperándote y el tiempo...

El tiempo alarga sus relojes, ahora te deseo más y tenés otro sabor: el sabor de la tentación.

Nena, te quiero, quiero que me toques, quiero ver tu sonrisa y tus labios apasionados y tus manos penetrando lo prohibido.

Pero vos... sufrís por él.

Podría decir que odio eso, que algo de rencor le tengo a él que lo sé artífice de tus penurias. Pero a la vez está ese halo mágico de desearte y que seas tan de él que no puedas seguir, que me cortés el éxtasis, que dejes el celo librado a las promesas orgásmicas no finalizadas por tus uñas que no entran...

A su vez me encanta.

Te hacen bella, inalcanzable, perfecta.

Déjame ahí, tirada en donde tu perfume emana negativas.