Breathe

Breathe
Nunca ha habido nada, pero todo lo que hay es mío.

7.07.2007

M Kitsch, Gótica, Electro-Pop, irrotulada por lo irresoluble de la pluralidad de M

Día gris. Más recuento de recuerdos, los recuerdos parecen un abanico que se despliega en la caja de la memoria y una elige que faceta quiere ver.
Por eso, hoy día gris y M.
M se convirtió en ajena, aunque no puedo asegurar que alguna vez haya sido algo conocido en mí. Más bien, M era M por ser ajena, M era la locura consagrada y sigue siéndolo, ir a una fiesta disfrazada de gótica del medioevo pero con aires de locura pop-moderna. Y es que M tiene ese glamour tan antiglamour que me abre los paraísos de lo desconocido: ¿Quién conoce a M? Quizás nadie la conozca como yo lo hice porque yo la conocí en lo desconocido, M es y fue una canción en mi reproductor, M fue la locura del alcohol y las drogas, M fue y es muchas cosas menos ella, porque se construye y se reconstruye en el relato de la vida, M tiene eso de especial: M no es.

Y es por eso que vino y se fue, vino para irse, para quedarse dos instantes como ajetreada y mirarla contemplando la M que no fue porque no es.

Y eso me encanta de ella.

O lo odio.

O ambas dos.